Un hombre que arrojó un sándwich a un agente federal en un ataque de furia por el aumento de la presencia policial del presidente Donald Trump en Washington, D.C., fue absuelto el jueves de un cargo menor de agresión.
Sean Dunn, exfuncionario del Departamento de Justicia de Estados Unidos , fue declarado inocente de agredir u obstruir a un agente federal tras un juicio de tres días en un tribunal federal de Washington que puso de relieve las tensiones en la capital por el despliegue de agentes del orden y la Guardia Nacional por parte de Trump para frenar la delincuencia.
El 10 de agosto, un vídeo que se viralizó rápidamente, captó a Dunn insultando a los agentes llamándolos “fascistas” antes de lanzar un bocadillo a un agente de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos que estaba de servicio en un barrio de ocio nocturno.
El agente Gregory Lairmore, con 23 años de servicio, testificó durante el juicio que el incidente dejó un fuerte olor a mostaza y cebollas colgando de la antena de su radio policial. El veredicto representó la última derrota para el Departamento de Justicia de Trump en relación con su represión en Washington.
Inicialmente, la fiscalía solicitó cargos por delito grave contra Dunn, pero los rebajó a delito menor después de que un gran jurado se negara a presentar una acusación formal. En varios otros casos, los grandes jurados también se negaron a acusar , una negativa muy inusual para la fiscalía.
La abogada de Dunn, Sabrina Shroff, argumentó que lanzar el sándwich fue un gesto inofensivo de frustración y que no podía herir a los agentes que llevaban chalecos antibalas. Shroff destacó los regalos de broma que el agente recibió de sus compañeros tras el incidente, incluyendo un parche que decía “Felony Footlong” (Sándwich de 30 cm por Delito Grave).
“Todos sabemos que este arma no fue lanzada con fuerza”, dijo Shroff durante los alegatos finales.
Los fiscales argumentaron que Dunn cometió un delito al interferir con la labor policial, señalando las imágenes de la cámara corporal en las que se puede oír a Dunn decir que quería alejar a los agentes de sus puestos.
El fiscal Michael DiLorenzo dijo al jurado que el derecho a la libertad de expresión de Dunn no le permitía “agredir a otra persona, ni siquiera con un sándwich”.
“Ahí es donde el acusado cruzó la línea”, dijo DiLorenzo.
Lairmore, uno de los dos únicos testigos llamados a declarar, testificó que los agentes percibieron una posible amenaza por parte de un Dunn agitado. Dunn, quien trabajaba en casos internacionales como miembro del Departamento de Justicia, fue condenado por altos funcionarios de la administración Trump en los días posteriores al incidente.
La Casa Blanca publicó un video en redes sociales donde se ve a agentes fuertemente armados arrestándolo. Trump desplegó equipos de agentes federales para patrullar Washington desde agosto, denunciando lo que describió como una crisis de delincuencia en la ciudad.
El aumento provocó un descenso inicial de algunos tipos de delitos, pero también generó una reacción negativa entre algunos residentes.