Un tribunal sudafricano ha dictaminado que la muerte del premio Nobel Albert Luthuli en 1967 fue el resultado de una «agresión» por parte de la policía del apartheid, revocando décadas de afirmaciones que sostenían que se trató de un accidente.
Una investigación realizada bajo el gobierno del apartheid concluyó que Luthuli, el primer africano en ganar el Premio Nobel de la Paz, murió tras ser atropellado por un tren de carga mientras caminaba por una vía férrea.
Pero los activistas y su familia llevaban tiempo poniendo en duda las conclusiones, y el gobierno de Sudáfrica reabrió el caso este año.
Un juez dictaminó el jueves que el héroe antiapartheid falleció a causa de una fractura de cráneo y una hemorragia cerebral derivadas de una agresión. Su familia ha acogido con satisfacción la sentencia.
Luthuli, quien al momento de su muerte era el líder del entonces ilegalizado Congreso Nacional Africano (ANC), ganó el Premio Nobel de la Paz en 1960 por encabezar la lucha contra el apartheid.
En abril, la Fiscalía Nacional de Sudáfrica reabrió nuevas investigaciones sobre la muerte de Luthuli, ya que familiares y activistas sospechaban que las autoridades del apartheid lo habían asesinado y encubierto el crimen.
Al dictar sentencia el jueves, la jueza Nompumelelo Radebe dijo que las pruebas presentadas en la investigación reabierta no respaldaban las conclusiones de la investigación de 1967.
“Se ha constatado que el fallecido murió como consecuencia de una fractura de cráneo, hemorragia cerebral y conmoción cerebral asociadas a una agresión”, dictaminó la jueza Nompumelelo.
El juez declaró que la muerte de Luthuli fue atribuible a «una agresión perpetrada por miembros de la rama especial de seguridad de la policía sudafricana, actuando en concierto y con un propósito común con empleados de la Compañía Ferroviaria Sudafricana».
Mencionó a siete hombres, cuyo paradero se desconoce, como autores o cómplices del asesinato. De ser encontrados, podrían enfrentar cargos penales.
Tras la lectura de la sentencia, el portavoz de la familia Luthuli la calificó como «el primer paso para finalmente obtener justicia».
La portavoz nacional del ANC, Mahlengi Bhengu, también celebró la decisión del tribunal, que según dijo «corrigió una distorsión histórica de larga data».
«Este fallo trae justicia, verdad y dignidad a la memoria de uno de los hijos más grandes de Sudáfrica y a todos aquellos que sufrieron bajo la brutalidad del apartheid», agregó Bhengu.
El caso que se está tramitando en el Tribunal Superior de Pietermaritzburg es el último de los renovados esfuerzos de las autoridades sudafricanas por hacer justicia a las víctimas de los crímenes de la época del apartheid y brindar consuelo a sus familias.
El mes pasado, los fiscales sudafricanos reabrieron la investigación sobre la muerte del líder antiapartheid Steve Biko , quien falleció bajo custodia policial en 1977 tras haber sido torturado.
En mayo, el presidente Cyril Ramaphosa estableció una comisión judicial de investigación para examinar las acusaciones de influencia indebida para retrasar u obstaculizar la investigación y el enjuiciamiento de los crímenes de la era del apartheid.