El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, atacó el reconocimiento de un Estado palestino por parte de varios países occidentales durante un discurso combativo en la Asamblea General de la ONU.
Netanyahu calificó las medidas de reconocimiento como una «marca de vergüenza» que envía el mensaje de que «asesinar judíos tiene recompensa».
Decenas de funcionarios y diplomáticos abandonaron el lugar cuando subió al podio, dejando gran parte de la sala de conferencias vacía. Afuera, manifestantes contra la guerra de Israel en Gaza se congregaron en Times Square.
Israel ha estado bajo enorme presión internacional por su acción militar en Gaza, que culminó con el reconocimiento del Estado de Palestina por parte del Reino Unido, Francia, Canadá, Australia y otros países esta semana.
En su discurso inaugural, Netanyahu mostró un mapa titulado «La Maldición» que, según él, mostraba grupos aliados iraníes en Oriente Medio. A continuación, destacó las operaciones militares israelíes del último año contra Hezbolá en el Líbano, los hutíes en Yemen, Hamás en Gaza e Irán.
Agradeció al presidente estadounidense, Donald Trump, por la participación estadounidense en el bombardeo de la planta nuclear iraní de Fordo en junio y estableció paralelismos entre el ataque de Hamás del 7 de octubre de 2023 contra Israel y el ataque del 11-S contra Estados Unidos. Afirmó que ambos países luchaban contra los mismos enemigos, señalando los cánticos de «muerte a Estados Unidos» de grupos vinculados a Irán.
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El primer ministro israelí repitió que Israel no permitirá que exista un Estado palestino y dijo que esta posición era apoyada por la gran mayoría de los israelíes.
Continuó refutando la conclusión de una comisión de investigación de la ONU de que Israel había cometido genocidio en Gaza , afirmando que la acusación «era infundada».
También rechazó las declaraciones de varias agencias de la ONU que afirman que Israel está restringiendo deliberadamente la cantidad de ayuda que entra en Gaza. En agosto, un organismo respaldado por la ONU confirmó que la ciudad de Gaza sufría hambruna.
Antes de su discurso, la oficina de Netanyahu ordenó que el ejército israelí instalara altavoces en camiones cerca de la valla perimetral de Gaza para transmitir sus palabras en vivo a todo el territorio.
Netanyahu también afirmó que la inteligencia israelí había pirateado los teléfonos inteligentes de los habitantes de Gaza y que les transmitiría su discurso directamente. Fuentes de la BBC en Gaza afirmaron que sus teléfonos no se habían visto afectados.
Dijo que la intención con esto era hacer llegar un mensaje a los rehenes israelíes allí.
«Nuestros valientes héroes», leyó desde el podio. «Les habla el primer ministro Netanyahu en directo desde las Naciones Unidas. No los hemos olvidado ni un segundo. El pueblo de Israel está con ustedes. No flaquearemos ni descansaremos hasta traerlos a todos a casa».
En Gaza quedan 48 rehenes, de los cuales se cree que 20 están vivos.
Fadi, residente de Gaza, dijo al programa OS del Servicio Mundial de la BBC: «¿Qué gana transmitiendo su discurso por la fuerza a los civiles asediados dentro de las tiendas, excepto humillarlos aún más?»
Netanyahu dedicó la última sección de su discurso a los vecinos regionales de Israel, diciendo que estaba cerca de un acuerdo de desescalada con Siria y pidiendo al gobierno libanés que intensificara sus esfuerzos para desarmar a Hezbolá.
Inmediatamente fue objeto de críticas dentro de Israel, y el líder de la oposición, Yair Lapid, escribió: «Hoy vi a un primer ministro israelí cansado y quejoso, en un discurso sobrecargado de trucos usados en exceso».
«En lugar de detener el tsunami diplomático, Netanyahu hoy empeoró la situación del Estado de Israel», escribió en X.
Yair Golan, líder del partido Demócratas de Israel, dijo que el discurso mostró «sólo victimismo, santurronería y total ceguera ante el sufrimiento de los rehenes y el sacrificio de los combatientes».
Calificó el truco del altavoz de «inválido, infantil y demente» y dijo que era un «espectáculo de propaganda».
Un día antes, el líder de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, dijo en su discurso ante la Asamblea General que está dispuesto a trabajar con los líderes mundiales para implementar un plan de paz para Israel y los palestinos.
Poco después de que Netanyahu terminara de hablar, Donald Trump declaró por separado a los periodistas: «Creo que tenemos un acuerdo sobre Gaza». No proporcionó más detalles, aunque se ha especulado cada vez más sobre la posibilidad de un acuerdo de alto el fuego.
Israel ha prohibido a periodistas internacionales entrar a la Franja de Gaza de forma independiente desde el inicio de la guerra hace casi dos años, lo que dificulta la verificación de las afirmaciones de ambos bandos. Algunos periodistas han sido admitidos en Gaza por las Fuerzas de Defensa de Israel con acceso controlado.
El ejército israelí lanzó una campaña en Gaza en respuesta al ataque liderado por Hamás contra el sur de Israel el 7 de octubre de 2023, en el que murieron unas 1.200 personas y otras 251 fueron tomadas como rehenes.
Al menos 65.549 personas han muerto en ataques israelíes en Gaza desde entonces, según el Ministerio de Salud del territorio, dirigido por Hamás.