Las personas cuyo rastreo familiar no salió según lo planeado están advirtiendo a otros sobre los riesgos, y un hombre dijo que no lo haría «si tuviera otra oportunidad».
Tras la muerte de su padre en 2022, John, de East Sussex, dijo que su esposa le compró un kit de prueba de ADN familiar como regalo de Navidad para animarlo.
Pero cuando llegaron los resultados, descubrió que su padre no era su padre biológico y que, de hecho, era el hijo de un amigo de la familia.
«Quedé devastado», dijo John. «Cambió por completo todo lo que creía saber».
El hombre de 60 años dijo que se sentía «perversamente afortunado» porque los padres involucrados habían fallecido, lo que le había ahorrado «conversaciones difíciles».
Pero añadió que tampoco había «nadie a quien pedirle respuestas».
«Mi madre habría sido una jugadora de póker increíble porque mantuvo la cara seria durante 50 años», continuó John. «Nadie tenía ni idea».
‘Sucio secreto’
John dijo que sus recién descubiertos medios hermanos en gran medida se negaron a hablar con él, y uno incluso se volvió hostil cuando se acercó a ellos, aunque otro le proporcionó su historial médico.
Recibió asesoramiento sobre lo sucedido (se consideraba un «secreto sucio»), pero dijo que ahora estaba en paz.
John dijo que los programas de televisión y las empresas de genealogía «impulsan esta teoría de que todo resultado es bueno, que encontrarás héroes de guerra… o una sufragista, pero mucha gente no».
Había visto casos de personas que descubrían que eran el resultado de una violación, un incesto y «todo tipo de historias de terror», dijo.
John agregó que los kits de pruebas de ADN deberían advertir mejor sobre posibles malos resultados e instó a las personas a no romantizar el rastreo familiar.
«Hoy en día, te advierten sobre el nivel de sal en el tocino… pero a las personas [se les puede destruir la vida y la salud mental] por completo», dijo.
Los kits de pruebas de ADN generalmente advierten sobre posibles resultados que alteren la vida antes de la compra o al acceder a los resultados, aunque ha habido pedidos de mejorar estas advertencias.
Chrissie, de Surrey, dijo que se reunió con su hermana Jennifer, quien fue puesta en adopción por la fuerza, después de 74 años.