El director ejecutivo de Lloyds, Charlie Nunn, advirtió que le preocuparía el futuro del Reino Unido si los reguladores impusieran más cargas a los bancos para lidiar con los crecientes riesgos que emanan de sus rivales en la industria bancaria en la sombra.
Nunn declaró el miércoles ante el Comité de Regulación de Servicios Financieros de la Cámara de los Lores que acoge con satisfacción las revisiones de los riesgos potenciales y las interconexiones entre los bancos tradicionales y la industria del crédito privado, tanto por parte del Banco de Inglaterra como de organismos internacionales como el Consejo de Estabilidad Financiera.
Sin embargo, Nunn afirmó que los bancos, que cada vez otorgan más préstamos a fondos de crédito privado y a sus empresas participadas, no deberían tener que asumir normas y requisitos de información adicionales, especialmente en una industria del crédito privado dominada por empresas estadounidenses
Necesitamos gestionar nuestros riesgos. Pero debemos tener mucho cuidado de no responsabilizar a los bancos por los riesgos del sector no bancario, ni de proporcionarles la transparencia necesaria; de lo contrario, perderíamos competitividad.
Y creemos firmemente que la transparencia es fundamental. Lo ideal sería que los reguladores determinaran cómo gestionar ese riesgo directamente a través del sector, y no a través del sector bancario.
Me preocuparía el futuro del Reino Unido si optara por esa vía, especialmente en el contexto de competitividad internacional actual.
Esto ocurre en un momento en que el sector del crédito privado, en gran medida no regulado, está bajo mayor escrutinio tras la quiebra de dos empresas estadounidenses (First Brands y Tricolor) y las advertencias del Fondo Monetario Internacional y el Banco de Inglaterra.
El gobernador del Banco de Inglaterra, Andrew Bailey , afirmó el mes pasado que los recientes fracasos tenían preocupantes ecos de la crisis de las hipotecas subprime que desencadenó la crisis financiera mundial de 2008. Mientras tanto, el FMI advirtió que una recesión podría tener efectos en cadena en todo el sistema financiero, dado que los bancos estaban cada vez más expuestos a un sector del crédito privado en gran medida no regulado.
Nunn afirmó que Lloyds no prestaba al sector del crédito privado.
El Banco de Inglaterra está preparando una prueba de resistencia para determinar si el auge del crédito privado corre el riesgo de amplificar las crisis en todo el sistema financiero del Reino Unido. Se esperan más detalles para finales de año.
