El líder de la megaiglesia evangélica La Luz del Mundo, con sede en México, se declaró inocente de los cargos de tráfico sexual en un tribunal de Nueva York.
Naasón Joaquín García, de 56 años, ya cumple una condena de 16 años tras admitir ante un tribunal en California haber abusado sexualmente de niñas de su congregación.
En una acusación recientemente revelada, los fiscales alegan que García, su madre y cuatro de sus asociados utilizaron la iglesia para el tráfico sexual de mujeres y niños a Estados Unidos.
Los acusados han negado todos los cargos, que el abogado de García dijo que eran «una repetición de viejas afirmaciones recicladas que se han hecho antes, analizado antes y, en última instancia, desacreditado y refutado antes».
Una organización cristiana fundamentalista, La Luz del Mundo, fue fundada en México en 1926 por el abuelo de García, Eusebio Joaquín González.
Los seguidores de la Iglesia consideran a García como «el apóstol de Jesucristo» y muchos se han mantenido leales a él incluso después de que se declarara culpable de abusar de niñas menores de edad en Los Ángeles en 2022.
Aunque su sede está en México, la iglesia dice tener millones de seguidores en todo el mundo.
Es difícil conseguir cifras de miembros independientes, pero su influencia es fuerte en partes de California que tienen grandes poblaciones hispanas, que García visitaba a menudo antes de su arresto allí en 2019.
En la acusación hecha pública por la Fiscalía del Distrito Sur de Nueva York hace dos semanas, los fiscales alegan que García y los otros cinco acusados participaron en tráfico sexual, pornografía infantil, trabajo forzado y tratos financieros ilegales.
Según el fiscal estadounidense Jay Clayton, los acusados »explotaron la fe de sus seguidores para aprovecharse de ellos».
«Cuando fueron confrontados, aprovecharon su influencia religiosa y poder financiero para intimidar y obligar a las víctimas a guardar silencio sobre el abuso que habían sufrido», agregó Clayton.
Los fiscales alegan que García siguió «una tradición profundamente perturbadora establecida por su padre (Samuel Joaquín Flores) y su abuelo (Eusebio Joaquín González, conocido como «Aarón»), quienes fundaron la iglesia en Guadalajara, México, aproximadamente en 1926″.
Según la acusación, «cada líder manipulaba a niñas y mujeres jóvenes haciéndoles creer que podían ganar una ‘bendición’ especial si le servía, lo que a menudo incluía en última instancia actividad sexual».
La Luz del Mundo publicó un comunicado en redes sociales calificando de «infundadas, falsas y calumniosas» las acusaciones contra su líder y los demás imputados.