Las familias de los dos hombres asesinados en el ataque a la sinagoga de Manchester los han descrito como personas heroicas que se preocupaban por su comunidad.
La familia de Adrian Daulby, de 53 años, quien se cree que recibió un disparo accidental de la policía, lo describió como un «héroe» que «perdió trágicamente la vida en un acto de valentía para salvar a otros».
Daulby fue uno de los fieles que impidió que un atacante ingresara a la sinagoga de la Congregación Hebrea de Heaton Park el jueves, dijo la policía del Gran Manchester.
El otro hombre que murió fue Melvin Cravitz, de 66 años, quien se cree que fue apuñalado hasta la muerte por el atacante en la puerta de la sinagoga.
Aunque su cuerpo aún no ha sido identificado formalmente, su familia rindió homenaje a un hombre “amable y cariñoso” que será profundamente extrañado.
En una declaración policial, dijeron: «Melvin hacía lo que fuera por ayudar a cualquiera. Era muy amable, atento y siempre quería charlar y conocer gente».
Era un hombre dedicado a su esposa y a su familia, y amaba la comida. Su esposa, su familia, sus amigos y la comunidad lo extrañarán profundamente.
“Pedimos privacidad mientras intentamos asimilar esta impactante pérdida”.
En un homenaje emitido por la fuerza, su familia declaró: «Adrian Daulby fue un héroe y perdió la vida trágicamente en un acto de valentía para salvar a otros. Era un hermano querido, un tío cariñoso para sus cuatro sobrinas y un sobrino, y un primo muy querido».
La familia está conmocionada por la trágica y repentina muerte de un hombre tan entrañable y sensato. Su último acto fue de profunda valentía y será recordado para siempre por su heroica acción del jueves 2 de octubre de 2025.
Los hombres murieron después de que el atacante usara un automóvil para entrar en el terreno de la sinagoga en Crumpsall, al norte de Manchester, y luego apuñalara a los fieles en un ataque que duró seis minutos y que terminó solo cuando agentes armados le dispararon dos veces.
Otras tres personas resultaron gravemente heridas en el ataque ocurrido en Yom Kippur, el día más sagrado del calendario judío.
La policía identificó al atacante el jueves por la noche como Jihad al-Shamie, de 35 años, ciudadano británico de ascendencia siria. La policía del Gran Manchester informó que otras tres personas —dos hombres de unos 30 años y una mujer de unos 60— fueron arrestadas bajo sospecha de comisión, preparación e instigación de actos de terrorismo.