El presidente argentino Javier Milei saludó la contundente victoria de su partido en las elecciones de mitad de período como un «punto de inflexión» para el país y prometió seguir adelante con su agenda de reducir el Estado y desregular la economía.
El pequeño partido La Libertad Avanza (LLA) de Milei se recuperó de una serie de reveses para ganar el 40,84% de los votos emitidos para miembros del Congreso, superando ampliamente a la oposición en una elección seguida de cerca por los inversores.
«Hoy llegamos a un punto de inflexión, hoy comienza la construcción de una Argentina grande», dijo el presidente de 55 años a sus partidarios en una fiesta de victoria en Buenos Aires.
Prometió continuar en el camino de las reformas con lo que predijo que sería «el Congreso más reformista de la historia de Argentina».
Ayer estaban en juego la mitad de los escaños de la Cámara de Diputados y un tercio de los del Senado.
El señor Milei dijo que LLA había más que triplicado su número de escaños, ganando 101 escaños en la Cámara de Diputados de la cámara baja, frente a 37, y 20 escaños en el Senado, frente a seis.
‘Hacia adelante, no hacia atrás’
El movimiento peronista de centroizquierda, en el poder durante gran parte de la historia de la posguerra argentina, quedó en segundo lugar con el 31,64%.
«Hay muchos más argentinos que quieren avanzar que retroceder», afirmó Milei sobre la desaparición de la oposición.
Las elecciones fueron la primera prueba nacional del apoyo a Milei desde que ganó el cargo hace dos años con la promesa de revivir la debilitada economía argentina a través de una serie de dolorosas reformas.
Los días previos a la votación estuvieron marcados por una corrida contra la moneda nacional, el peso, que obligó a Milei a pedir un rescate al presidente estadounidense Donald Trump, un aliado cercano.
Estados Unidos prometió un paquete de ayuda sin precedentes de 40.000 millones de dólares (34.000 millones de euros).
En la fiesta electoral de la LLA, cientos de partidarios de Milei celebraron los resultados con vítores, abrazos, cánticos e incluso lágrimas.
«Estoy muy contento y emocionado; no esperaba una cifra tan grande», dijo a la AFP Facundo Campos, un consultor de marketing de 38 años, comparando la alegría con el «último gol del último Mundial ganado por Argentina».
María Jesús Galán, una funcionaria de salud de 45 años, dijo que si bien hay «algunos aspectos por mejorar» en el gobierno de Milei, «tiene un gran futuro».
La participación electoral alcanza su nivel más bajo en cuatro décadas
Antes de las elecciones, varios electores de Milei habían hablado con la AFP sobre su decepción con su gestión, en particular con los escándalos de corrupción que involucran a miembros de su círculo íntimo.