El Día Internacional del Café es una de las celebraciones más esperadas por los amantes de esta bebida en todo el mundo. Cada 1 de octubre, cafeterías, productores, tostadores y consumidores se unen para rendir homenaje a una tradición que trasciende fronteras y que mueve tanto emociones como economías.
En países productores como Brasil, Colombia o México, la fecha tiene un impacto directo en la vida de millones de agricultores. Sin embargo, en Argentina —un país donde el café no se cultiva a gran escala— el festejo se vive desde otra perspectiva: como un símbolo cultural y social que forma parte de la vida cotidiana en bares, confiterías y cafeterías de especialidad.
Este artículo recorre la historia del café, las razones por las que se celebra el 1 de octubre, cómo se vive esta fecha en distintos lugares de Latinoamérica, y qué significa para Argentina en 2025.
¿Por qué se celebra el Día Internacional del Café el 1 de octubre?
El Día Internacional del Café fue establecido por la Organización Internacional del Café (ICO) en 2015. La elección del 1 de octubre busca crear una fecha única a nivel mundial para:
- Reconocer el trabajo de quienes producen y elaboran café.
- Promover un consumo responsable y sostenible.
- Difundir la cultura cafetera en países consumidores y productores.
- Incentivar a cafeterías y marcas a organizar actividades, descuentos y promociones especiales.
De hecho, en muchos países las cadenas más grandes como Starbucks, Dunkin’ o cafeterías de especialidad locales lanzan promociones especiales durante este día, reforzando la relación de los consumidores con la bebida.
Historia del café y su expansión global
El café tiene una historia milenaria. Su origen se atribuye a Etiopía, donde según la leyenda un pastor llamado Kaldi descubrió que sus cabras se volvían más activas al comer los frutos rojos del cafeto.
Desde África, el café llegó al mundo árabe, donde se convirtió en parte esencial de la vida social y religiosa. En el siglo XVII arribó a Europa y se popularizó en ciudades como Venecia, Londres y París, donde las cafeterías se transformaron en centros de debate político y cultural.
Más tarde, la planta se expandió a América Latina, encontrando suelos fértiles en países como Brasil, Colombia, Honduras y México. En estas regiones, el café no solo se convirtió en motor económico, sino también en un elemento central de la identidad cultural.
Hoy en día, se estima que se consumen más de 1.400 millones de tazas de café al día en todo el mundo, lo que lo convierte en una de las bebidas más populares junto con el té y el agua.
El café en Argentina: tradición sin día oficial
A diferencia de países productores, Argentina no cuenta con un Día Nacional del Café. Sin embargo, el 1 de octubre se ha incorporado al calendario de celebraciones gracias a la difusión internacional.
En Argentina, el café no se produce de manera masiva, pero sí se consume en grandes cantidades. La cultura del café en el país está marcada por:
- El café con medialunas, un clásico del desayuno porteño.
- La tradición de los bares notables de Buenos Aires, muchos de los cuales son patrimonio cultural.
- El auge del café de especialidad, con cafeterías que han sido reconocidas a nivel internacional.
De hecho, en 2025 seis cafeterías argentinas fueron seleccionadas en el ranking The World’s 100 Best Coffee Shops, destacándose por su calidad y propuesta innovadora. Entre ellas se encuentran Barista Coffee House en Rosario y LAB Tostadores de Café en Palermo, lo que demuestra que el café argentino se abre paso en el escenario mundial.
Montevideo y su escena cafetera
En Uruguay, el Día Internacional del Café también tiene un impacto creciente. Medios como El País destacaron recientemente 10 cafeterías en Montevideo para disfrutar del café de especialidad, entre ellas:
- La Farmacia (Ciudad Vieja), con ambiente clásico.
- 1:14 Café, pequeño y acogedor.
- Culto, con varias sucursales en la ciudad.
- Seis Montes, dedicado exclusivamente al café.
- Ritual y Patrimonio, que mezclan modernidad y tradición.
Estas propuestas reflejan un fenómeno regional: el crecimiento del café de especialidad y la búsqueda de experiencias más allá del simple espresso.
Chile: celebraciones con promociones
En Chile, medios como BioBio destacan que el Día del Café se vive con descuentos y promociones en cadenas nacionales e internacionales. Por ejemplo:
- Starbucks ofrece cafés altos a precios especiales.
- Dunkin’ lanza descuentos del 50 % en todas las bebidas.
- Marley Coffee aplica 2×1 en bebidas a base de café hasta el mediodía.
- Krispy Kreme regala café acompañado de una doughnut.
Estas acciones ayudan a acercar el consumo de café a un público más amplio y a difundir la celebración en mercados donde el café compite con otras bebidas como el té o las infusiones.
Beneficios del café: ciencia y sabor
Más allá de lo cultural y lo económico, el café también tiene beneficios para la salud si se consume con moderación:
- Aumenta la concentración y el estado de alerta.
- Contiene antioxidantes que ayudan a combatir el envejecimiento celular.
- Puede reducir el riesgo de enfermedades neurodegenerativas como Alzheimer y Parkinson.
- Favorece el metabolismo y el rendimiento físico.
En este sentido, medios internacionales como QuePasa Media subrayan el valor científico del café, destacando que no solo es una bebida placentera, sino también un aliado para el bienestar cuando se consume con equilibrio.
Cómo celebrar el Día del Café en Argentina
Aunque no haya un día nacional oficial, en Argentina se puede celebrar el Día Internacional del Café de múltiples formas:
- Visitar una cafetería de especialidad en tu ciudad.
- Probar un nuevo método de preparación en casa.
- Disfrutar de un café con medialunas en un bar notable de Buenos Aires.
- Compartir fotos y experiencias en redes sociales con los hashtags #DíaDelCafé y #InternationalCoffeeDay.
- Elegir marcas que promuevan la sustentabilidad y el comercio justo.
Reflexión final
El Día Internacional del Café 2025 no es solo una excusa para beber café, sino una oportunidad para valorar todo lo que implica: la historia de su cultivo, el trabajo de los caficultores, la cultura que lo rodea y las experiencias que genera en nuestra vida diaria.
En Argentina, aunque no exista un día oficial, el café es parte inseparable de la vida social. Desde los bares tradicionales hasta las cafeterías de especialidad premiadas a nivel mundial, el país celebra su amor por esta bebida todos los días.
Así, cada taza se convierte en un homenaje a una tradición global que sigue creciendo y que cada año, el 1 de octubre, nos recuerda que el café es mucho más que una simple bebida: es cultura, es economía y es conexión humana.