Al menos 15 personas han muerto en un nuevo brote del virus del Ébola en la República Democrática del Congo, informó el Ministerio de Salud del país.
La presencia del virus fue confirmada en una mujer embarazada de 34 años que fue ingresada en el hospital el mes pasado después de mostrar síntomas que incluían fiebre alta y vómitos repetidos, agregó el ministerio.
Murió pocas horas después por un fallo multiorgánico.
Este será el decimosexto brote del virus mortal en el vasto estado de África central que tiene servicios de salud deficientes y está afectado por un conflicto en el este.
El último brote se encuentra en la provincia central de Kasai, con 28 casos sospechosos registrados, dijo el ministerio.
Las autoridades han instado a que se respeten estrictamente las medidas preventivas, incluido el lavado frecuente de manos y el distanciamiento social en zonas de alto riesgo.
Las pruebas identificaron la cepa Zaire del ébola, una enfermedad rara pero a menudo mortal, dijeron las autoridades.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) dijo que estaba “actuando con determinación para detener rápidamente la propagación del virus y proteger a las comunidades”.
Entre las 15 personas fallecidas había cuatro trabajadores sanitarios, añadió.
“Es probable que el número de casos aumente a medida que la transmisión continúa. Los equipos de respuesta y los equipos locales trabajarán para encontrar a las personas que puedan estar infectadas y necesiten atención, a fin de garantizar que todos estén protegidos lo antes posible”, añadió la OMS en un comunicado .
La República Democrática del Congo dispone de una “reserva de tratamientos”, incluidas 2.000 dosis de la vacuna Ervebo, “eficaces para proteger contra este tipo de ébola”, indicó el organismo sanitario mundial.
El último brote de ébola en la República Democrática del Congo ocurrió hace tres años y mató a seis personas.
Un brote ocurrido entre 2018 y 2020 fue mucho más letal y se cobró más de 2.000 vidas.
El virus, que se cree que se originó en los murciélagos frugívoros, se detectó por primera vez en 1976 cerca del río Ébola en lo que hoy es la República Democrática del Congo.
Las personas se infectan cuando tienen contacto directo, a través de la piel lesionada, o la boca y la nariz, con sangre, vómito, heces o fluidos corporales de alguien con ébola.