La leyenda viviente Lionel Messi saldrá del Estadio Monumental de Buenos Aires el jueves por la noche (5:30 am del viernes, hora de Bangladesh) sabiendo que será su último partido clasificatorio al Mundial en su suelo natal.
A sus 38 años, el capitán argentino ya lo ha conseguido todo: dos Copas América, un Mundial en Qatar y un legado imperecedero que hasta su entrenador admite que es “irrepetible”.
Argentina, clasificada desde hace tiempo para el Mundial de 2026 y ya líder de la tabla sudamericana, se enfrentará a Venezuela antes de viajar a Ecuador para su último encuentro.
Llegará un momento en que no estará aquí, y la pérdida será enorme. No puede haber un heredero para Messi. Lo que ha hecho durante tanto tiempo será imposible de repetir.
Para el equipo de Lionel Scaloni ya no importan los resultados, sino la emoción.
“Disfrutémoslo ahora, lo máximo que podamos, todos los partidos que pueda jugar”, dijo Scaloni a Flashscore esta semana.
El técnico, que guió a Argentina al Mundial de 2022, también destacó que el equipo debe mantenerse sólido más allá de la era Messi.
“Afortunadamente tenemos jugadores que hacen menos su ausencia y eso es importante”, dijo, y agregó que los partidos contra Venezuela y Ecuador también fueron una oportunidad para probar caras nuevas.
Messi no ha confirmado si la final de 2026 será su despedida, pero insinuó que estas son sus últimas clasificatorias. Con el Inter Miami, no ha dado señales de bajar el ritmo, anotando 27 goles y 11 asistencias esta temporada, pero sabe que el tiempo corre en su contra.
Pero para muchos, todas las miradas estarán puestas en Buenos Aires. Como dijo el propio Messi, el partido de mañana “será un partido muy especial”: la última vez que la afición argentina lo verá en casa en un partido de clasificación.