El gran gol de Alexandros Kyziridis y el penalti de Lawrence Shankland dieron al equipo de Derek McInnes una ventaja de 3-1 de la que los actuales campeones no pudieron recuperarse.
Dane Murray, uno de los tres jóvenes del once del Celtic, remató con fuerza contra su propia red al principio del partido para poner a Hearts por delante en un Tynecastle que rebotaba, y fue la falta del jugador de 22 años la que provocó el penalti.
El primer gol de la temporada de Callum McGregor rápidamente anuló el primer tanto de Hearts, y Benjamin Nygren casi puso al equipo de Rodgers por delante, optando por la delicadeza en lugar de la potencia y permitiendo que Alexander Schwolow atajara desde corta distancia.
Pero el irreprimible Hearts de Derek McInnes tomó el control nuevamente para condenar al Celtic a dos derrotas consecutivas en la liga por primera vez desde 2023.
Esto también le otorga al equipo de Edimburgo una ventaja dominante en la cima.
La última vez que estuvieron tan claros fue en 2005-06 bajo el mando de George Burley, cuando acabaron segundos, una de las cuatro ocasiones en las que un equipo no logró ganar el título habiendo mantenido tal ventaja en los últimos 27 años.
McInnes, cuyo equipo Aberdeen quedó segundo detrás del Celtic en cuatro ocasiones, se ha esforzado por restar importancia a las conversaciones sobre el título, mientras Hearts busca su primera corona en la máxima categoría desde 1960.
Rodgers ya lo ha visto todo en el Celtic: inicios de temporada impecables y titubeantes. Aún no ha terminado segundo.
Pero con la evidencia del domingo, este equipo de Hearts demostró que necesita ser tomado en serio.
Los Hearts comenzaron con la confianza de un equipo invicto en la liga esta temporada: el favorito de los fanáticos, Kyziridis, envió un centro para que Shankland rematara desviado.
El Celtic no pudo evitar un descuido inusual en la posesión y se derrumbó ante su primer examen real.
El cabezazo de Claudio Braga fue desviado al poste por Kasper Schmeichel y el balón de regreso de Shankland fue desviado hacia la red por el desafortunado Murray, que sustituyó al lesionado Cameron Carter-Vickers.
El Celtic se adentró en la contienda y empezó a enlazar pases. En una de esas jugadas, Sebastian Tounekti liberó a Tierney para que le diera el pase a McGregor, quien entró.