La internacional estadounidense de 18 años marcó su debut en Francia con un gol, continuando su rápido comienzo en la vida profesional.
Ily Yohannes no pierde el tiempo. La joven de 18 años marcó en su debut internacional con Estados Unidos a los 16 años el año pasado, tras haber sido titular en el Ajax. Ahora, tras su fichaje por el OL Lyonnes, una potencia europea, este verano, Yohannes marcó un gol y fue nombrada jugadora del partido en su debut con el club, una victoria por 3-1 sobre el Olympique de Marsella.
Nacida en Springfield, Virginia, de padres eritreos, Yohannes tenía 10 años cuando se mudó a Europa después de que su padre aceptara un trabajo en Ámsterdam. Jugó en un equipo amateur masculino y rápidamente se ganó la atención del Ajax, que la fichó para su cantera a los 13 años.
“Hay que hacer sacrificios para jugar al máximo nivel… Tuve una infancia diferente a la de otros, pero creo que he encontrado un buen equilibrio entre mi dedicación al fútbol y disfrutar de mi vida fuera del fútbol”, declaró Yohannes a The Guardian US en una entrevista exclusiva antes del inicio de la temporada. “Desde que me uní al Ajax, pude percibir el nivel de detalle, cómo intentan implementar el estilo de juego del Ajax y su filosofía, y creo que eso ha impulsado mi juego tanto táctica como técnicamente. Estoy muy agradecido al Ajax por mi desarrollo a lo largo de los años”.
Yohannes tenía 15 años cuando se convirtió en la jugadora más joven, hombre o mujer, en firmar un contrato profesional con el Ajax. Siete meses después, se convirtió en la jugadora más joven en ser titular en un partido de la fase de grupos de la UEFA Women’s Champions League y en la estadounidense más joven en jugar en la competición. Dos meses después, Yohannes fue nombrada jugadora del partido en la victoria por 2-0 contra la Roma en la Champions League. Destacó tanto a nivel nacional como internacional y recibió el premio Johan Cruyff al talento del año para la temporada 2023-24, otorgado a la mejor jugadora sub-20 de la Vrouwen Eredivisie. Yohannes acumuló cinco goles y cuatro asistencias en 20 partidos, ayudando al Ajax a terminar segundo y a vencer al Fortuna Sittard en la final de la Copa Femenina KNVB.
No tardó mucho en recibir una lluvia de ofertas de Estados Unidos y Países Bajos para jugar con su selección nacional, y Yohannes finalmente decidió representar al país donde creció. Al debutar, seguía los pasos de su abuelo materno, Bokretsion Gebrehiwot, quien jugó para Etiopía (país que se anexionó Eritrea entre 1950 y 1993). Minutos después de entrar, se desmarcó de su oponente y remató con serenidad para sellar una victoria amistosa por 3-0 sobre Corea del Sur. A una semana de cumplir 17 años, Yohannes se convirtió en la tercera goleadora más joven en la historia de la selección femenina de Estados Unidos.
“Llevar la camiseta de Estados Unidos siempre es un gran honor, y marcar en mi debut fue un momento surrealista”, dijo Yohannes. “Lo que más recuerdo es que, después de marcar, todos mis compañeros corrieron hacia mí para celebrar. Compartirlo con ellos, mi familia y mis amigos es algo que nunca olvidaré”.
Continuó destacando con el Ajax mientras se graduaba del instituto. Sus actuaciones con el Ajax despertaron el interés del OL Lyonnes, que la fichó por tres años el 7 de julio. En tan solo unos años, Yohannes pasó de ser una estadounidense más en el extranjero a un fichaje importante para uno de los equipos más potentes del fútbol femenino.
“Cuando el Lyon mostró su interés, me emocioné muchísimo. Lo que han logrado a lo largo de los años, lo que han ganado, han impulsado el fútbol femenino aún más en Francia y en el panorama europeo demostrando su dominio”, dijo Yohannes. “Obviamente, hay que adaptarse al cambio de entorno, pero mis compañeras y el cuerpo técnico me están ayudando a integrarme, y estoy disfrutando jugando con tantas jugadoras de talla mundial de las que puedo aprender. El Lyon es un club muy ambicioso y se caracteriza por ganar, así que quiero formar parte de él y ganar tantos títulos como pueda”.