Cada vez es más probable que Gary O’Neil regrese sorpresivamente a los Wolves, ya que el club está en conversaciones avanzadas para volver a contratar a su ex entrenador.
Los Wolves han mantenido conversaciones positivas con O’Neil sobre su posible regreso al puesto del que fue destituido el pasado diciembre . Los Wolves, que visitan al Chelsea el sábado, podrían cerrar su nombramiento en las próximas 48 horas. O’Neil sustituiría a Vítor Pereira, quien fue cesado tras la alarmante octava derrota en diez partidos contra el Fulham el sábado , que dejó a los Wolves en el último puesto de la Premier League con solo dos puntos.
O’Neil fue destituido por los malos resultados y los problemas de indisciplina dentro del equipo, pero a pesar del enfado de la afición antes de su salida, el técnico de 42 años se marchó en buenos términos y los Wolves creen que podría revitalizar al equipo. De ser contratado, se espera que O’Neil trabaje con un cuerpo técnico diferente. Durante su etapa como entrenador, los Wolves fueron especialmente vulnerables a balón parado.
El entrenador del Middlesbrough, Rob Edwards, cuenta con admiradores de larga data en los Wolves, pero tiene contrato con el Riverside Stadium hasta 2028 y es más difícil de fichar.
Edwards disputó más de 100 partidos con los Wolves, donde entrenó tanto en la cantera como en el primer equipo. También tuvo un breve periodo como entrenador interino en 2016, poco después de que Fosun, el propietario de los Wolves, comprara el club.
El Tottenham solo ha ganado una vez en cinco partidos en Emirates Stadium con Frank como entrenador, perdiendo tres, lo que perpetúa una tendencia preocupante. El equipo suma tres victorias y doce derrotas en diecinueve partidos de liga como local y ha perdido 41 veces en el estadio desde su inauguración en 2019. A la afición de los Spurs le duele saber que su máximo rival, el Arsenal, ha perdido 48 partidos de liga en el Emirates Stadium, inaugurado en 2006.
Frank se mostró encantado de proporcionar detalles sobre cómo Van de Ven y Spence habían ido a verlo por separado el domingo para disculparse, mientras comenzaban los preparativos para el partido de la Liga de Campeones en casa contra el Copenhague el martes por la noche.
Frank es plenamente consciente del mal partido de su equipo contra el Chelsea —no generaron ninguna ocasión de gol— y aceptó que los abucheos llegaran tras el pitido final. Pero también dejó claro que era necesario un mayor apoyo de la afición durante el encuentro. Hubo abucheos, por ejemplo, hacia el final del partido contra el Chelsea, cuando el portero, Guglielmo Vicario, optó por un pase lateral en lugar de una jugada más directa.
