Cuando Shehbaz Sharif, el primer ministro de Pakistán, abrazó al príncipe heredero saudí Mohammed bin Salman en Riad la semana pasada, el simbolismo fue inconfundible.
El abrazo se produjo después de la firma de un “acuerdo estratégico de defensa mutua”, que acerca al único estado con armas nucleares del mundo islámico a la monarquía más ambiciosa del Golfo.
Un alto funcionario saudí declaró a Reuters que el pacto era simplemente una “institucionalización de una cooperación profunda y duradera “. Pero muchos en India lo ven de otra manera.
A pesar de la cordialidad que Delhi mantiene con Riad, el pacto se concreta en un contexto de creciente hostilidad con Pakistán, que incluye un conflicto de cuatro días a principios de este año. India y Pakistán, vecinos con armas nucleares, han librado múltiples guerras y enfrentamientos por Cachemira, lo que convierte cualquier medida de Arabia Saudí para apoyar al ejército pakistaní en una preocupación directa.
Lo que más inquieta a los analistas indios es el compromiso del pacto de que “cualquier agresión contra cualquiera de los países será considerada una agresión contra ambos”.
“Riad sabía que India interpretaría el pacto entre Arabia Saudita y Pakistán como una amenaza directa a su seguridad, pero aun así siguió adelante”, publicó en X Brahma Chellaney, un estratega indio.
“Esta medida no refleja la fortaleza de Pakistán —que sigue al borde de la bancarrota—, sino las ambiciones de Arabia Saudita”, afirma. Vincular a un socio “crónicamente dependiente”, argumenta, le otorga a Riad tanto personal como un “seguro” nuclear, a la vez que demuestra a India, Washington y otros que trazará su propio camino.
El ex secretario de Asuntos Exteriores de la India, Kanwal Sibal, calificó el pacto como un “grave paso en falso” de Arabia Saudita, advirtiendo que esto podría tener serias implicaciones para la seguridad nacional de la India.
“Un Pakistán políticamente inestable y económicamente quebrado como proveedor de seguridad es una propuesta peligrosa. Arabia Saudita sabe que esto se interpretará en India como una amenaza para su seguridad”, publicó el Sr. Sibal en X. “Dadas las tensiones entre Pakistán e India, esta medida saudí es estratégicamente muy audaz”.
El gobierno indio liderado por Narendra Modi se ha mostrado más cauto, y un portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores señaló que el gobierno “estudiará las implicaciones del pacto para la seguridad nacional y la estabilidad regional y global”. India también esperaba que la alianza estratégica entre India y Arabia Saudita “considerara los intereses y las sensibilidades mutuas”.