La tercera temporada de Top Chef VIP llegó a su fin en Chilevisión y tuvo como gran ganadora a la cantante Carolina Soto, quien logró imponerse en la final luego de una exigente competencia marcada por emociones, esfuerzo y también dificultades de salud que casi la obligan a abandonar el programa.
Una final exigente
En la última prueba, los tres finalistas —Carolina Soto, María Fernanda “Mafe” Bertero y Ricardo Fernández— debieron preparar un menú completo con entrada, fondo y postre. El jurado valoró la creatividad, la técnica y la presentación, y finalmente eligió a Soto como la vencedora.
El triunfo le permitió llevarse un premio de 20 millones de pesos chilenos y un Jolion Pro-Híbrido de GWM cero kilómetro.
Un triunfo con dedicatoria familiar
Al recibir el reconocimiento, Soto dedicó el logro a sus padres. En la final estuvo acompañada por su madre, mientras recordaba con emoción a su padre y su gran pasión por el mar, lugar con el que la artista siente hoy una conexión muy especial.
Obstáculos en el camino: “Estuve hospitalizada”
En entrevista con La Cuarta, la cantante reveló las complicaciones que enfrentó durante el programa:
“En el camino me enfermé, me dio neumonía. La última semana de competencia yo estuve hospitalizada tres días y el programa me dio la posibilidad de esperarme hasta que el doctor dijera que podía seguir concursando”.
Soto confesó que incluso pensó en retirarse:
“Yo iba a renunciar, porque dije ‘bueno, mi salud primero’. Obviamente, la palabra neumonía te asusta un poco. Yo soy cantante y trabajo con mis pulmones y con mi respiración. Pero en el programa todos me ayudaron, me apoyaron. Fueron muy bacanes conmigo”.
Una victoria con sabor especial
La intérprete, recordada por su paso en Rojo, celebró que la experiencia no solo significó un premio material, sino también un aprendizaje personal sobre resiliencia, pasión y superación. Con su triunfo, se suma a la lista de ganadores que han hecho de Top Chef VIP uno de los programas más comentados de la televisión chilena reciente.