Carlo Ancelotti se mantiene optimista sobre las perspectivas de Brasil para el próximo Mundial, a pesar de su reciente derrota por 1-0 ante Bolivia. Este partido puso fin a la fase de clasificación, con un gol de penalti de Miguel Terceros en el primer tiempo, asegurando la clasificación de Bolivia para la repesca intercontinental. Brasil ya tenía asegurada su plaza en el torneo que se celebrará en Estados Unidos, Canadá y México.
Durante el partido contra Bolivia, Brasil tuvo dificultades para encontrar su ritmo. Logró un total de goles esperados (xG) de tan solo 0,36 en 10 remates, de los cuales solo tres fueron a portería. En contraste, Bolivia logró un xG de 1,78 en 23 intentos. Esta derrota marcó la primera de Ancelotti desde que asumió el cargo en mayo, sustituyendo a Dorival Junior tras una serie de malas actuaciones.
Ancelotti guió a Brasil en sus últimos cuatro partidos de clasificación, consiguiendo dos victorias contra Paraguay y Chile y un empate con Ecuador. A pesar de estos resultados, Brasil tuvo su peor campaña de clasificación sudamericana, con un 52% de éxito. Sin embargo, cabe destacar que su segunda peor campaña, la de 2002, terminó con la victoria en la Copa Mundial.
El partido contra Bolivia fue un reto tanto técnico como físico. Ancelotti comentó tras el encuentro: “Hoy fue un partido difícil, tanto técnica como físicamente… Vamos por buen camino para el Mundial”. Expresó su confianza en que Brasil se preparará bien para los próximos partidos y llegará preparado al Mundial.
Con la clasificación ya asegurada antes de enfrentarse a Bolivia, Ancelotti realizó nueve cambios en su alineación. Alisson y Bruno Guimaraes fueron los únicos jugadores que se mantuvieron tras su victoria anterior contra Chile. Nuevas caras como Andrey Santos, Lucas Paqueta, Richarlison, Caio Henrique, Alexsandro Ribeiro, Fabricio Bruno y Vitinho se incorporaron al once inicial.
Ancelotti explicó su decisión: “Todos los jugadores de este grupo tendrán nuevas oportunidades porque trabajaron muy bien toda la semana… Quería aprovechar este partido para conocer a algunos jugadores”. A pesar de estos cambios, Brasil no pudo asegurar la victoria.
Tras la derrota ante Bolivia, Samir Xaud, presidente de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF), criticó varios aspectos del partido. Lo describió como “un auténtico desastre”, expresando su decepción por lo que consideró unas condiciones futbolísticas mediocres. Xaud declaró: “Lo que queremos es que sea aún más importante… Con esta actitud… es difícil jugar al fútbol”.