Los recientes comentarios de Lionel Messi sugiriendo que podría saltarse la Copa del Mundo de 2026 fueron noticia en todo el mundo , mientras los fanáticos aún esperan ver al capitán argentino dar un último baile en el escenario más grande del fútbol y defender el trofeo.
Antes del partido clasificatorio del martes contra Ecuador, un partido que Messi se perderá después de elegir priorizar su estado físico para el resto de la temporada de la MLS, el entrenador de Argentina, Lionel Scaloni, admitió que no ha discutido esos comentarios con el delantero estrella.
“No creo que sea correcto calcular un porcentaje hoy porque, sinceramente, no lo sé”, explicó Scaloni. “Pueden pasar muchas cosas. Ya tenemos un grupo base de jugadores; todos lo saben. A partir de ahí, cuando sepamos cuántos puestos tendremos, tomaremos decisiones. En cuanto a Leo, no he hablado con él al respecto. Solo sé lo que dijo públicamente, y se tomará su tiempo para tomar esta decisión”.
Messi será la ausencia destacada contra Ecuador, tras haber regresado a Miami para reincorporarse al Inter Miami bajo la tutela de Javier Mascherano. Argentina, sin embargo, ya se ha asegurado el primer puesto de la CONMEBOL con 38 puntos, con una amplia ventaja de 10 puntos sobre Brasil, segundo clasificado, a falta de un partido.
Esta también fue la última conferencia de prensa de Scaloni en la fase de clasificación para el Mundial, ya que Argentina culminará su participación contra Ecuador en Quito. El entrenador dejó en el aire su futuro más allá del Mundial, pero reflexionó positivamente sobre su gestión hasta el momento.
Me concentro solo en lo que viene; nunca he sido de pensar demasiado en el futuro. No creo que sea correcto porque me distrae del presente. Ahora mismo, estamos centrados en el partido de mañana y los próximos amistosos. Ya veremos qué pasa después. Por ahora, me siento bien aquí», dijo.
Scaloni destacó la ética de trabajo y la identidad que su cuerpo técnico ha inculcado: «Desde el primer día, nos propusimos crear un sentido de pertenencia, jugar por la camiseta sin sentirlo como una obligación, con la mentalidad adecuada y respeto por los compañeros. Lo hemos logrado. Ganar, obviamente, ayuda, pero incluso sin los trofeos, los jugadores y todos los que forman parte del equipo estuvieron a la altura de los valores que nos propusimos construir».